La actividad física es importante y benéfica para todo ser humano, ayuda a fortalecer los músculos, mejora el funcionamiento del corazón y los pulmones, regulariza la presión arterial, disminuye el estrés, la ansiedad y la depresión. Y lo mejor de todo es una forma de convivir con la familia o amigos.
También es un factor indispensable para el buen control de la diabetes, ya que se ha comprobado que la actividad física incrementa la capacidad del organismo para disminuir los niveles de azúcar, aparte de ser un aliado invaluable para mejorar el estado de salud en general.
Junto con el seguimiento en la educación en diabetes, una alimentación balanceada y adecuada, la administración puntual de medicamentos o insulina, es uno de los pilares en el control y tratamiento de la diabetes.
Todos necesitamos de azúcar en nuestro cuerpo como fuente de energía para realizar actividades y esfuerzos físicos, en las personas con diabetes induce a que el organismo consuma la glucosa almacenada en hígado y músculos, obligando a que esta reserva energética se reponga con azúcar que se encuentra circulando en la sangre.
Practicar ejercicio en forma continua no sólo proporciona mayor resistencia corporal, sensación de bienestar y logra reducir el colesterol “malo” y triglicéridos, responsables de problemas en el corazón y sistema circulatorio, si no también ayuda a bajar y mantener el peso recomendado, lo cual es benéfico para un mejor control de la diabetes o se evita llegar a tenerla.
Las actividades cotidianas no se pueden considerar como ejercicio ya que el cuerpo está acostumbrado a estas, se debe de realizar actividades diferentes a lo que se está acostumbrado en la rutina del diario vivir.
Es importante tener conocimiento de los niveles de azúcar, más cuando se decide realizar alguna actividad física vigorosa ya que se puede tener una hipoglucemia (niveles bajos de azúcar) y eso puede ser peligroso, se recomienda siempre traer un una bebida con azúcar o un dulce en la bolsa y consumirlo en caso de empezar a sentir los síntomas de hipoglucemia, pregunta a tu medico o educadora cuales son. No realizar actividades con el estomago vacio, si la actividad es por la mañana temprano siempre consumir una fruta antes de empezar y si es en el transcurso del día que no hayan pasado más de 4 horas de haber consumido alimento, esto ayudará a evitar las bajas de azúcar. Nunca se debe sobrecargar al cuerpo con ejercicio excesivo.
Antes de comenzar un programa de ejercicios se recomienda una visita al médico para someterse a un examen clínico y control cardiológico, a fin de determinar el tipo de ejercicio más conveniente a realizar, su duración y frecuencia, siempre en base a los alimentos que consuma y la aplicación de medicamentos, con más razón cuando se utiliza insulina.
Las personas que llevan mucho tiempo con diabetes o que ya tienen alguna complicación necesitan particular atención.
Si ya se tiene algún problema con las vista (retinopatía: daño en la retina del ojo ocasionada por altas concentraciones de glucosa) tener presente que el fuerte impacto que generan las actividades o deportes violentos, intensos y en los que se requiere mantener baja la cabeza, pueden empeorar el estado de la vista. Por lo que se recomienda realizar ejercicios en los cuales no se baje la cabeza por debajo del pecho, dentro de casa y en compañía de alguien.
Los pies pueden sufrir daño si hay pérdida de la sensibilidad o mala circulación. Se deben extremar precauciones en cuanto al tipo del calzado, que no haya nada que lastime el pié como una piedra o la calceta doblada, así como el área en que se realiza la actividad física.
Si se tiene algún problema cardiaco, y se comienza a hacer ejercicio sin consultar previamente al médico, se corre el riesgo de agravar el padecimiento.
El ejercicio aeróbico (aquel que genera amplia circulación de aire en los pulmones) es por lo general el más recomendable para los pacientes con diabetes, ya que favorece el trabajo de los principales músculos del cuerpo, como piernas y brazos. Otras actividades efectivas son: caminar, nadar, correr sin excederse, andar en bicicleta, futbol soccer, basquetbol, voleibol, así como bailar.
Recomendaciones:
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- Realizar actividades de 3 a 5 veces por semana como mínimo, comenzando con una rutina poco intensa, con duración de 10 minutos, y poco a poco aumentar hasta llegar a 30 o 60 minutos.
-Planificar el ejercicio para realizarlo a la misma hora cada día. - No realizar ejercicio si los niveles de glucosa en ayuno son mayores a 250 mg/dl, considere que el rango ideal es entre 100 hasta 180 mg/dl.
- Consumir algún carbohidrato si los niveles de glucosa son menores a 80 mg/dl.
- Llevar un control de la hora en que se realiza la actividad física, su duración e intensidad, el nivel de azúcar antes y después del ejercicio, y la dosis de insulina utilizada.
- Realizar actividades de 3 a 5 veces por semana como mínimo, comenzando con una rutina poco intensa, con duración de 10 minutos, y poco a poco aumentar hasta llegar a 30 o 60 minutos.
- Evitar el ejercicio en condiciones de calor o frío extremos.
- Llevar ropa adecuada al tipo de ejercicio y temporada, vestir ropa ligera, de colores claros, además de utilizar gorra.
- Siempre se deben recuperar los líquidos perdidos al sudar, el agua natural es la mejor bebida para lograrlo.
- Antes de iniciar se debe realizar calentamiento, y al terminar ejercicios de recuperación y respiración.
Finalmente, considerar que una vez que se ha establecido un programa de ejercicio, debe mantenerse una práctica constante para observar buenos resultados, así como un estricto apego a la medicación y alimentación indicadas en base a los chequeos de glucosa durante el día. Esto nos ayudará a tener el control de la diabetes.
Por Andrea Díaz González / Orientadora en Diabetes
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